El nacimiento del Troll Brain
El cerebro humano es un órgano fascinante. Todos tenemos uno (aunque debo admitir que algunas personas te hacen sentir como si no lo tuvieran). Pero, ¿alguna vez has sentido que te hace falta un manual de instrucciones para tu cerebro? Y luego, mientras lo piensas, te preguntas: ‘Bueno, ¿cuántas páginas tendría ese manual de instrucciones realmente?’. Así es como me siento la mayor parte del tiempo. Mi nombre es Tim y tengo un Troll Brain. Esto puede sonar como una confesión tipo “alcohólicos anónimos”, pero de hecho, me enorgullece ser el dueño de mi Troll Brain. La razón por la que llamo a mi cerebro “The Troll Brain” es porque a veces parece como si en realidad fuera un pequeño troll. A veces me pregunto de dónde saca mi Troll Brain todas sus ideas, especialmente cuando de repente tengo una idea o un estallido de motivación en medio de la noche, cuando en realidad quiero dormir. Y la historia continúa… 😉
TheTroll Brain es un proyecto que ha estado en mi mente durante mucho tiempo. De hecho, ya dibujaba mis primeros borradores cuando aún estaba en la escuela. Siempre he tenido una relación especial con mi cerebro. Me diagnosticaron cefalea en racimos cuando tenía solo 16 años. La cefalea en racimos es una condición que te da cefaleas muy severas. A diferencia de la migraña, te da múltiples ataques de dolor de cabeza intenso a lo largo del día. Es una enfermedad que me dejó sintiéndome devastado y agotado durante muchos años. La enfermedad me privó de una adolescencia normal. Lo que siempre me ha ayudado a lidiar con la enfermedad y a desarrollar una actitud más optimista ante la vida fue aprender cómo funciona el cerebro y qué sucede en mi cerebro mientras tengo un ataque de dolor. Afortunadamente, encontré un neurólogo muy bueno que ha sido muy empático y siempre me ha brindado acceso a las mejores opciones de tratamiento disponibles en su momento. Ahora tengo controlados mis cefaleas y me siento muy agradecido por ello. Por lo tanto, a lo largo de los años, aprendí a apreciar mi cerebro, aunque no sea perfecto. Aunque tiene algunos defectos, hace cosas increíbles todos los días y me ha permitido hacer cosas increíbles, como aprender idiomas, dibujar, aprender nuevos instrumentos y… estudiar medicina.
A veces, somos muy duros con nosotros mismos, nos sentimos poco inteligentes u incompetentes y solemos olvidarnos de apreciar nuestros logros y capacidades. También nos olvidamos fácilmente del hecho de que el cerebro humano es un órgano asombroso y fascinante. Todos tenemos nuestros momentos difíciles: todos podemos actuar de una manera poco inteligente a veces, ser incongruentes, sentirnos tristes, inseguros, etc. Esto es lo que nos hace humanos. No deberíamos ser tan duros con nosotros mismos y con nuestro cerebro. La sociedad moderna espera que seamos felices, productivos, bien educados, asertivos, decididos (la lista continúa) todo el tiempo. Eso es mucha presión y está lejos de ser realista, porque es igual de importante estar triste, improductivo, poco creativo, perezoso, incongruente u indeciso de vez en cuando. En esencia, deberíamos dejarnos sentir todo el espectro de emociones- no solo las positivas. Todas las emociones tienen un propósito. Y es por eso que estoy dibujando este cómic. Me gustaría demostrar que a veces podemos equivocarnos por completo, pero la vida sigue. Las cosas no siempre tienen que tener sentido.
Muchas personas ya me han dicho que se podrían identificar con mis cómics. Y eso es increíble: saber que les gustan mis cómics para mí es la mejor recompensa que existe. Realmente aprecio sus comentarios, tanto positivos como negativos. Ya he pasado por muchas situaciones difíciles durante mi vida, por eso me gusta tomarme la vida con humor. En retrospectiva, casi siempre me puedo reír de la mayoría de las situaciones incómodas que ya he experimentado. Y eso es básicamente de lo que se trata mi cómic: entretenimiento. La vida es más agradable cuando podemos reírnos de nosotros mismos.
Básicamente siempre he estado dibujando. Ya me acuerdo dibujando mis primeros cómics e inventando pequeñas historias cuando solo tenía 3 años. La idea de crear un cómic sobre mi Troll Brain ya estaba en mi mente desde hace muchos años, si no décadas (tengo 34 años, por cierto ;)). Sin embargo, en 2020 cuando comenzó la pandemia, finalmente tuve algo de tiempo (de hecho, tuve demasiado tiempo) y energía para pensar en un diseño y algunas ideas más concretas. Como puedes ver en la imagen de arriba, que en realidad fue mi primer borrador del Troll Brain, la apariencia tanto del personaje como del Troll Brain han evolucionado un poco con el tiempo. ¡Espero que te guste el resultado!
Ah… y en caso de que te estés preguntando a qué me gano la vida (que no es dibujar cómics): soy médico. La neurología y la psiquiatría siempre me han fascinado. A largo plazo, también me gustaría brindarles algunos datos interesantes sobre el sistema nervioso en este sitio. Pero recuerda que estoy dibujando este cómic desde la perspectiva de una persona privada.
¡Entonces, disfruta de tu dosis regular de disonancia cognitiva!
Muchos saludos,